Desde el Área de Libertad de Expresión Afectivo-Sexual de Izquierda Unida de La Rioja lamentamos que la Iglesia, vuelva a manifestarse en contra de la familia y la felicidad de las personas.
Es una verdadera lástima que una mayoría de la Jerarquía Española intente marginar al colectivo homosexual con su repudio a la apertura de derechos al colectivo LGTB como es el matrimonio civil a parejas homosexuales.
Seguimos viendo a unos obispos obsesionados con la defensa de su visión de la familia tradicional. En pleno siglo XXI, no parece que aceptar el divorcio, el aborto en las circunstancias establecidas por las leyes o los matrimonios de homosexuales deba ser motivo de tanta crispación como para sacar a sus feligreses a la calle.
Una familia monoparental, homoparental, homosexual, para ellos no es familia y expresan su rechazo, y no sólo eso, sino que se sienten atacados y por ello, responden con un “en defensa de la familia”.
Lamentamos que el ver a dos personas que se quieren y se ayudan el uno al otro, que están deseando adoptar o tener un hijo para poderle dar todo su amor y sus recursos, lo vean como una amenaza para “su familia” y no como una familia en sí misma.
Otro de los puntos de la larga lista de acoso y derribo que la Iglesia han emprendido contra los avances sociales propiciados en los últimos años, destaca últimamente la campaña contra la Educación para la Ciudadanía. De “Educación para la tiranía”, “adoctrinamiento”, “propaganda” y “nueva versión de la franquista Formación para el Espíritu Nacional” ha sido calificada desde la jerarquía eclesial, mientras reivindican la “objeción de conciencia” para la materia.
Desde ALEAS IU Rioja celebramos que en nuestra sociedad haya cualquier tipo de familia mientras se ayuden unos a otros de forma estable y sean felices. Son los únicos requisitos que creemos necesarios.
Pedimos al Gobierno que rompa de una vez el Concordato Iglesia-Estado y abogamos por una sociedad, donde todas las personas puedan vivir en inigualdad y donde unas familias valgan mas que otras.
Es una verdadera lástima que una mayoría de la Jerarquía Española intente marginar al colectivo homosexual con su repudio a la apertura de derechos al colectivo LGTB como es el matrimonio civil a parejas homosexuales.
Seguimos viendo a unos obispos obsesionados con la defensa de su visión de la familia tradicional. En pleno siglo XXI, no parece que aceptar el divorcio, el aborto en las circunstancias establecidas por las leyes o los matrimonios de homosexuales deba ser motivo de tanta crispación como para sacar a sus feligreses a la calle.
Una familia monoparental, homoparental, homosexual, para ellos no es familia y expresan su rechazo, y no sólo eso, sino que se sienten atacados y por ello, responden con un “en defensa de la familia”.
Lamentamos que el ver a dos personas que se quieren y se ayudan el uno al otro, que están deseando adoptar o tener un hijo para poderle dar todo su amor y sus recursos, lo vean como una amenaza para “su familia” y no como una familia en sí misma.
Otro de los puntos de la larga lista de acoso y derribo que la Iglesia han emprendido contra los avances sociales propiciados en los últimos años, destaca últimamente la campaña contra la Educación para la Ciudadanía. De “Educación para la tiranía”, “adoctrinamiento”, “propaganda” y “nueva versión de la franquista Formación para el Espíritu Nacional” ha sido calificada desde la jerarquía eclesial, mientras reivindican la “objeción de conciencia” para la materia.
Desde ALEAS IU Rioja celebramos que en nuestra sociedad haya cualquier tipo de familia mientras se ayuden unos a otros de forma estable y sean felices. Son los únicos requisitos que creemos necesarios.
Pedimos al Gobierno que rompa de una vez el Concordato Iglesia-Estado y abogamos por una sociedad, donde todas las personas puedan vivir en inigualdad y donde unas familias valgan mas que otras.
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